“Que Dios bendiga la nueva zafra que inicia; que fortalezca las manos de los cañicultores, los transportistas y de todos los trabajadores para que su esfuerzo sea fructífero; que el clima sea favorable, el sol, adecuado para la maduración de la cosecha; que no falten los recursos, el combustible y los repuestos para que la molienda se realice sin contratiempos alcanzando las metas de producción y que el éxito de esta zafra se traduzca en bienestar y prosperidad para el Estado, contribuyendo con la seguridad agroalimentaria y el desarrollo de la Nación”.
Ésa, fue la petición especial realizada la mañana de este miércoles por la familia del Central Azucarero Portuguesa en la tradicional Misa de Inicio de Zafra 2025-2026, celebración eucarística que tuvo lugar en el Club Don Antonio Cisneros y congregó a trabajadores de la factoría, directivos y cañicultores, quienes con fe pidieron al Todopoderoso su bendición y protección para nuevamente hacer realidad una molienda exitosa.


El padre Douglas José Ramírez Guillén, de la Parroquia Nuestra Señora de Coromoto y de la Parroquia Nuestra Señora de la Paz (Payara) ofició la hermosa Misa, celebrada en honor a los siempre recordados Oswaldo Cisneros y Rafael Arco, quienes en vida dieron ejemplo de disciplina y amor por el trabajo impulsando el éxito y el legado organizativo que hoy tiene el Central Portuguesa.


Vale acotar que, en sus palabras, el sacerdote, habló a los asistentes del amor y cómo cada quien lo vive según la disposición de su corazón. Dijo que el amor es entrega, es el sustento de todo y él debe prevalecer, así como la fraternidad, el compañerismo y el entender que debemos aceptarnos tal y como somos, reconociendo las fallas personales, defectos y debilidades, además de las virtudes de los demás porque “si nos entregamos a Dios, él hará su obra en nosotros porque Dios escucha y nos cobija con su bendición”.
Redacción: Yorky Araque CNP 11.447
05/11/2025










